Brad Schimel comenzó su carrera legal en el condado de Waukesha, primero como pasante y luego como fiscal adjunto. Fue elegido fiscal de distrito del condado de Waukesha en 2006 y ocupó ese cargo hasta que fue elegido fiscal general de Wisconsin en 2014. Después de su mandato como fiscal general, regresó al juzgado del condado de Waukesha como juez del tribunal de circuito (1).
Sr Schimel ha sido descrito como la elección de las fuerzas del orden debido a su amplia experiencia en el procesamiento de varios delitos graves, incluidos el abuso de ancianos, la trata de personas, el homicidio, la agresión sexual, los delitos contra los niños a través de Internet y la corrupción pública. Todos estos son puntos muy atractivos para la comunidad hispana que desea vecindarios y entornos de trabajo seguros y protegidos. También ha recibido el respaldo de numerosos alguaciles de Wisconsin, asociaciones policiales y líderes de las fuerzas del orden, lo que sugiere un fuerte respaldo de la comunidad de las fuerzas del orden (2).
Como fiscal general, Schimel implementó reformas destinadas a combatir el abuso de drogas, la explotación de ancianos y las amenazas a la seguridad de los niños. También participó en la creación de la Oficina de Trata de Personas del Departamento de Justicia de Wisconsin, lo que indica su compromiso de abordar este problema a nivel estatal (3).
La campaña de Sr Schimel para la Corte Suprema de Wisconsin obtuvo un importante apoyo de las bases, como lo demuestra la recolección de 12,000 firmas de nominación, lo que demuestra su atractivo más allá.
Susan Crawford es otro candidata corriendo por el puesto de juez. Ella ha servido de jueza en el condado de Dane y anteriormente representaba a los demócratas y a Planned Parenthood como abogada (4). Crawford ha recibido el respaldo de Planned Parenthood de Wisconsin, lo que indica su apoyo al derecho al aborto. Crawford ha indicado el deseo de eliminar Acto 10 que entró ley años atras para el eliminacion de abuso de fondos que se miraba en esos años. Ha recibido mucho critica sobre eso.
Los críticos acusan a Crawford de ser una activista política en lugar de una jueza neutral. Su apoyo por parte de grupos liberales, incluidos los cuatro jueces liberales de la Corte Suprema de Wisconsin, y su trabajo legal previo en representación de causas demócratas y de Planned Parenthood, han llevado a algunos a argumentar que ella traería una agenda partidista a la corte (5). El público necesita jueces imparciales que no estén politizados por ningún grupo. Jueces politizados luego descriminan en el momento de juzgar casos.
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